Podemos
empezar a entrenar nuestra atención en pequeñas formas. Cuánto tiempo podemos mirar a
un objeto frente a nosostros sin instrusiones? Qué queremos decir con intrusiones?
Cualquier cosa que tenga que ver con algo diferente al objeto de nuestra atención es una
intrusión, sea mental, física, emocional, visual, perceptual o sensitiva. No importa lo
que sea. Cualquier cosa que no sea el objeto intencional de nuestra atención directa y
que pueda en potencia, distraernos de nuestro propósito, es técnicamente una intrusión.
Entonces, cuánto tiempo podemos mirar a un objeto sin intrusiones? No mucho tiempo-lo
cual significa que nuestra atención es débil.
Hay muchos nombres para esta particularidad-señalada como consciencia
y atención los cuales han sido usados para expresar esta idea a través de una variedad
de tradiciones espirituales desde los tempranos escritos metafísicos Egipcios, los
filósofos y místicos griegos pre-Socraticos, el Buddhismo, Hinduismo, Sufismo, y los
monasterios medievales incluyendo a Santo Tomás de Aquino.
La pregunta tras todos estos nombres es si estamos o no en condiciones
de mantener nuestra atención en nada más que el objeto elegido, sin ninguna
interrupción. Podemos mirar a algo, haciendo eso y nada más que eso?
Cuando lo podamos hacer, entonces podremos dirigirnos a realizar
proyectos más ambiciosos. Por ejemplo, cuando leemos un libro. La única forma en la que
normalmente mantenemos nuestra atención en el libro es a través de nuestro interés.
Pero, podemos leer un libro en el cual no estemos interesados, y mantener nuestra
atención en él como si fuera de nuestro interés?
Si el interés guía y atrae la atención; ésa no es una atención de
trabajo. Si solamante estamos atendiendo algo porque estamos interesados en ello, entonces
hemos perdido totalmente la dirección. Debemos estar preparados para poner nuestra
atención donde querramos ponerla, y mantenerla allí sin intrusiones por tanto tiempo
como deseemos-ya sea por horas o meses o años-excluyendo todo lo demás.
Hay una distinción importante entre la atención específica que
podemos llamar simplemente atención y la atención general. Aun cuando nuestra atención
esté puesta exclusivamente en algo, podemos tener una atención general de todo lo demás
al mismo tiempo. Hay una atención específica y una atención general. De modo que cuando
ponemos nuestra atención en un objeto, podemos tener también la atención general en el
entorno. Si no lo hacemos entonces o somos estúpidos, enfermos, ciegos, tontos, o todo lo
anterior.
Cuando estamos desatentos, hacemos cosas estúpidas. Cuando la máquina
está dormida, suceden cosas estúpidas. Parece como si la falta de atención y el sueño
tienen que ver el uno con el otro. La pista es que la atención proviene del ser esencial.
El ser esencial es la fuente de atención. La pérdida de atención puede tener dos causas
diferentes. La primera causa es que el ser esencial ha cesado de ser una fuente de
atención por el momento. Por una u otra razón, no está invocando su propia presencia y
ha perdido su atención.
Presencia y atención caen en la categoría de aquello que está
completamente dentro del rango de lo voluntario. En otras palabras, no hay la atención
involuntaria ni la presencia involuntaria.
El ser esencial debe tomar acción para atención y presencia aparezcan
porque deben ser despertadas. Nosotros invocamos nuestra presencia o no lo hacemos. Ella
no será invocada por si misma. El ser esencial tiene que decidir reunir atención y
presencia, juntarlas, traerlas de vuelta, o incrementar su alcance y rango. Sin embargo,
la atención específica nunca puede obtener la clase de rango que la atención general
puede incluir, aunque mucho se puede hacer con ello.
La atención general es una de las formas de atención de la máquina.
La máquina tiene varios tipos diferentes de atención. La palabra atención es
malentendida porque la usamos tanto al referirnos al ser esencial como a la máquina.
Deberíamos tener diferentes nombres para ambos, pero el lenguaje es limitado y realmente
no hay otra palabra que podamos usar. Sería mejor decir atención de la máquina y
atención del ser, aunque esto es una distinción artificial. Hablando técnicamente,
podríamos decir que la atención solamente se refiere a una cualidad del ser.